Los guantes eróticos no abrigan, pero sí calientan. Son puro fuego al alcance de tus manos… literalmente.
Los guantes erótico...
MASTERGLOVE es el accesorio ideal si buscas elevar tus experiencias sensoriales y adentrarte en nuevas formas de placer a través…
Unas manos preciosas y moviéndose delicada e incestuosamente, pueden ser el juguete más sensual que jamás haya existido.
Los…
Perfectos para combinar con algunos de tus modelos más sexys.
 Perfectos para hacer un striptease delicado, sensual y…
Rimba te trae estos maravillosos guantes de látex. Un complemento ideal para seducir a tu pareja.
Si nunca has…
Estos guantes sexys no te servirán para cocinar, limpiar o hacer un muñeco de nieve. Los guantes de lencería son pura estética, fantasía y seducción. No abrigan, pero suben la temperatura que da gusto. No aprietan, pero dejan sin respiración. Están hechos para estilizarte, acariciar a tu pareja y quitártelos lentamente cuando llegue el momento.
Estos complementos eróticos pueden ser de satén brillante, encaje floral, rejilla o transparencias que insinúan más de lo que muestran. A veces cubren toda la mano y el brazo hasta el codo, otras apenas rozan la muñeca. Si la lencería erótica te flipa, los guantes son la guinda del pastel.
En el universo de los guantes sexys de lencería hay un par para cada persona y estilo. Están los elegantes, los juguetones, los atrevidos y los que hablan sin hablar:
Los guantes sexys son como el pintalabios rojo del mundo de la lencería. Le dan fuerza a todo el look y elegancia a los gestos.
Las combinaciones que puedes crear son infinitas, por ejemplo, puedes combinarlos con un body sexy, especialmente si tiene espalda descubierta o un escote profundo, los guantes largos realzarán tu figura.
Si llevas un conjunto de encaje blanco, rosa o nude, opta por guantes con un tono a juego. Si solo te apetece llevar unas medias sexys y tacones, agrégale unos guantes largos de satén y la escena se volverá cinematográfica.
¿Te sientes en modo show privado? Súmale una bata de tul o satén, juega con los movimientos, haz que cada gesto sea parte de la experiencia.
Y si te sientes más clásica, un conjunto simple de lencería negra nunca falla y puede volverse inolvidable con unos guantes de rejilla o encaje que atrapen la mirada.
Sí. Rotundo sí. Sin dudarlo ni medio segundo. Los guantes de lencería elevan, redefinen y mejoran cualquier outfit. Y no hablamos solo de lo visual, también te cambian el porte, la postura, la actitud. De pronto, caminas con más decisión, te miras al espejo con otros ojos y sientes más deseo.
Además, no hace falta que sea para alguien. Puedes usarlos solo para ti, para sentirte especial, para jugar a solas mientras usas tu succionador favorito. Porque sí, porque te apetece.
Así que sí, merece muchísimo la pena. Porque un detalle tan pequeño puede despertar grandes pasiones.
No, los guantes de lencería y los guantes BDSM no son lo mismo. Los guantes de lencería son pura elegancia y seducción con texturas de encaje, satén, transparencias. Los BDSM suelen ser de cuero o látex, con hebillas y cierres pensados para juegos de poder más intensos.
Son perfectos para sorprender en una noche especial, una sesión de fotos íntima, un show privado o simplemente para sentirte increíble en casa. También combinan genial con disfraces eróticos. ¿Hace falta una excusa? Con que te apetezca, ya es ocasión suficiente.
Muchos modelos son de talla única con tejidos elásticos, pero si tienes brazos más anchos o finos, prueba con unos más cortos o de rejilla que se adapten a ti como un guante, nunca mejor dicho.
A mano, siempre. Agua fría, jabón suave y sin frotar demasiado. Nada de lavadora ni centrifugado salvaje. Déjalos secar al aire, sin sol directo. Así conservarán su forma, color y textura para volver a brillar la próxima noche.