Un dildo, también conocido como consolador, es un juguete sexual diseñado con forma fálica para ser introducido por la vagina o el ano. Por lo general se caracterizan por no tener motor ni ninguna función de vibración o masajeadora, aunque sí que podemos encontrarnos algún diseño de dildo vibrador.
Que esto no te engañe, los dildos no son para nada aburridos. Si te preguntas cómo funcionan los consoladores, te diremos que estos vienen en diferentes formas, colores e incorporan funciones tan originales que te dejarán con la boca abierta. Algunas de estas funciones tan alucinantes son:
- Con eyaculación: están huecos por dentro para que los rellenes con tu lubricante favorito y simules una eyaculación. ¡Es de lo más excitante!
- Con ventosa: la ventosa te permitirá colocarlo en infinitas superficies, vertical, horizontal, boca abajo…Tu decides donde quieres tener una experiencia manos libres.
- Gigantes: son de mayor tamaño, más largos y anchos y no se recomiendan utilizar si estás empezando en este mundillo, pero si el cuerpo te pide marcha, estos dildos son perfectos.
- Rígidos: si te gustan las emociones fuertes estos consoladores son para ti. De metal o de cristal estos dildos rígidos son para los más atrevidos. Mételos en la nevera unos minutos y experimenta una sensación de frío en tu interior que te pondrá la carne de gallina.
Las opciones en el mundo de los dildos son infinitas. Aparte de contar con mil y un diseños y prestaciones, también cambian su forma dependiendo de la zona del cuerpo en la que se vaya a usar o de si se va a hacer en pareja o solitario.
Dildos vaginales para estimular el Punto G
Los más clásicos, la mayoría de consoladores están diseñados para ser introducidos por la vagina debido a su tamaño y forma.
Estos dildos para Punto G cuentan con una curvatura en la punta para alcanzar bien la zona adecuada y estimular directamente este punto desde el interior. Como ya sabes, es el punto erógeno mágico de las personas con vagina, así que masajeándolo conseguirás tener unos orgasmos increíbles.
Cómo funcionan los dildos para punto G
Un dildo vaginal suele tener la forma de un pene, a veces con diseños más realistas y otras no tanto, ¡existen dildos fosforitos! Su funcionamiento es sencillo, debe introducirse en la vagina bien lubricado poco a poco y, una vez dentro, comienza a realizar movimientos.
Por ejemplo, si usas uno con ventosa, puedes hacer movimientos con tu cuerpo sobre el dildo. Puedes también manipularlo con la mano, así controlarás la velocidad y los movimientos. Estos movimientos pueden ser en círculos o percutores (mete-saca), ve variando para ponerte a cien y darle más vida a tus masturbaciones.
Un dildo vaginal también puedes usarlo en pareja, introdúcelo en tus relaciones sexuales y será como hacer un trío sin la necesidad de incorporar a terceras personas. Puede ser un buen entrenamiento por si un día te apetece hacer un trío de verdad, quien sabe.
Dildos anales
Un dildo anal es ideal para explorar esta parte trasera a tu ritmo. Es perfecto para abrir camino o para conseguir una doble penetración durante tus relaciones sexuales
Es muy similar a un plug anal, aunque existen algunas diferencias, sobre todo a la hora de entender cómo funciona el consolador.
Cómo funciona un dildo anal
A diferencia de un plug anal que está diseñado para dejarlo puesto como un tapón. Un consolador anal está pensado para moverse dentro de ti y estimularte. Esto da mucho más juego y hace que experimentes sensaciones más intensas.
Su funcionamiento es el mismo que el del un consolador vaginal, aunque los dildos anales suelen tener un tamaño más pequeño y fino para que introducirlos por el ano sea más fácil. Pero bueno, nosotros no somos quien para juzgar y decirte donde parar, si te gustan las cosas a lo grande…¡adelante! Tú pones el límite.
Alguno de estos consoladores son una combinación de dildo anal y vaginal. Doble penetración para conseguir doble placer, estos incorporan un extremo de mayor tamaño para introducir en la vagina y otro más pequeño para introducir en el ano. Un dildo 2 en 1 que satisfará todas tus fantasías.
Dildos para parejas
¿Quién dice que los dildos son solo para utilizarlos en solitario? Donde caben dos caben tres, y ya te adelantamos que al ser dos personas vuestro placer y excitación también se va a multiplicar.
Los consoladores son geniales para usarlos en pareja, existen varias opciones:
- Dildos dobles: son más largos de lo normal y cuentan con dos extremos, tú y tu pareja lo podéis usar simultáneamente.
- Dildos para arnés: se colocan con un arnés en la zona de la pelvis para simular un pene de verdad de forma que si no tienes pene, con este juguete podrás vivir la experiencia de penetrar a tu pareja.
Cómo funcionan los dildos dobles
Un consolador doble es un dildo de mayor tamaño con dos extremos para introducirlos simultáneamente. Pueden usarse en pareja o en solitario para una penetración doble, ya que son lo suficientemente flexibles como para doblarlos e introducir una parte en la vagina y otra en el ano.
Para usarlos en pareja, debéis lubricar bien ambos extremos e introducirlos poco a poco. Una vez introducido del todo, deberéis sincronizar vuestros movimientos, podéis moveros a la vez, siguiendo la misma velocidad e intensidad o uno de vosotros puede quedarse quieto mientras la otra persona se mueve y marca el ritmo.
Cómo funciona un dildo para arnés
Otra forma de utilizar un dildo en pareja es utilizar un arnés. Algunos arneses ya vienen con un dildo incorporado y otros están diseñados para que puedas colocar el que más te guste y así poder cambiar de estilo cada vez que te apetezca.
El arnés debe colocárselo uno de vosotros a modo de ropa interior, el dildo quedará ubicado en la zona de la pelvis a modo de pene y así poder penetrar al otro. Algunos dildos para arnés están huecos por dentro para poder introducir el pene en ellos.
Una vez todo esté en su sitio solo queda disfrutar, la persona que lleve el arnés puede ser la encargada de realizar los movimientos o quedarse quieta y dejar que sea su amante quien la cabalgue, o…mejor aún, ¡os podéis ir turnando!
Cómo usar un dildo
Los dildos tienen otros usos prácticos más allá de la excitación y el placer. Un dildo puede servir también como dilatador en el caso de necesitarlo por algún motivo médico o cómo prótesis a la hora de mantener relaciones en el caso de personas que sufran disfunción eréctil pero no quieran dejar de disfrutar del sexo con su pareja.
Sea cual sea el uso que vayas a darle a tu consolador, la forma correcta de utilizarlo será, en primer lugar, lubricarlo bien para que fluya mejor. La comunicación también es muy importante, asegúrate de que el tamaño y la intensidad de los movimientos sean los adecuados y tu pareja se siente cómoda.
Una vez hayáis acabado, como siempre, limpiad bien vuestro juguete con un limpiador apto y guárdalo en un lugar seco y fresco para que se conserve mejor.
Ya conoces todos los secretos de un consolador y como funciona, ¡ahora solamente te queda escoger tu dildo ideal y empezar a gozar!
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