El 69 es una de esas posturas que todo el mundo conoce, pero que pocos se atreven a admitir que no saben hacer bien. En la imaginación es pura fantasía, dos cuerpos encajando como si fueran piezas de un puzle perfecto. En la realidad… bueno, puede ser todo un éxito o puede convertirse en un intento fallido de sexo oral.
Pero no te agobies, el 69 es más cuestión de actitud que de flexibilidad y técnica. Y sobre todo, de saber cómo colocar vuestros cuerpos para que nadie termine con tortícolis o haciendo malabares con la mandíbula. Aquí te contamos paso a paso cómo hacer un buen 69, divertido, sin dramas y sin convertirse en el juego del Twister.
¿Cómo hacer un 69 paso a paso?
Lo primero es lo primero, ¿qué es un 69? Básicamente, es una postura sexual donde ambos os dais placer oral al mismo tiempo colocándoos una persona encima de la otra, de forma que vuestras bocas queden justo frente a los genitales de vuestra pareja.
Hacer un 69 puede parecer algo superfácil (y realmente lo es), pero antes de meteros de cabeza al lío, lo mejor es relajaros y quitaros toda presión. Pensad que es una postura sexual divertida, íntima y muy de equipo. Reíros si os descolocáis, moveos hasta encontrar el punto exacto y pensad que lo importante no es hacerlo perfecto, sino placentero para ambos.
1. Encontrad la posición ideal
La versión clásica es la de siempre, acostados, uno arriba y otro abajo, encajando como cucharitas al revés. Es cómoda, es estable y perfecta para empezar. Pero si queréis algo más relajado, el 69 de lado es una joyita, podréis moveros sin peso encima y respirar mejor.
También podéis probar variaciones según el cuerpo de cada uno, piernas más abiertas, caderas elevadas… No existe la postura perfecta, solo la que no os corta la circulación ni os deja sin aire. Si las bocas llegan bien a donde tienen que llegar y nadie está haciendo equilibrismos imposibles, es la buena.
2. Ajustad vuestros cuerpos y altura
Aquí empieza el Tetris erótico. No tengáis miedo a recolocaros, subid un pelín la cadera, moved la pelvis, ajustad el ángulo…
Si uno de vosotros queda demasiado arriba o demasiado abajo, la postura se vuelve incómoda y se rompe el ritmo. Un cojín o una manta doblada debajo de las caderas, la espalda o el pecho puede hacer milagros. Es el truco secreto de los 69 más pros.
3. Empieza con movimientos suaves y coordinados
Hacer un 69 es multitarea pura, estás dando placer mientras lo recibes. Por eso, empezad despacito, sin prisas. Buscad vuestro ritmo, ese en el que ambos podéis disfrutar sin perderos en el intento.
Empezar suavecito os permitirá coordinar respiración, movimientos y sensaciones. Y cuando ya vais en la misma frecuencia… entonces sí, a subir la intensidad.
4. Añade ritmos, manos y algún invitado extra
Una vez estáis en sintonía, ¡empieza el juego! Usa las manos para tocar, rozar, masajear el pene o meter los dedos en la vagina, así podrás coger aire sin cortarle el rollo a tu pareja. Variar ritmos también suma, más rápido, más lento, más profundo, más superficial…
Y si queréis subirlo a nivel premium, podéis añadir un vibrador, un succionador o un juguete sexual pequeño que no estorbe. La clave es que ese extra sume sin romper el ritmo que ya tenéis montado.
5. Mantén la postura sin cansarte
Aquí viene la parte práctica, si estás arriba, reparte tu peso. Apóyate con brazos y piernas, no caigas con todo tu cuerpo encima de tu pareja o la dejarás sin respiración.
Si estás abajo, vigila el cuello, no lo fuerces hacia arriba. Ajusta la cabeza o pide que se muevan un poquito para aliviar la tensión. Si estáis empezando, es posible que tengáis que cambiar de posición varias veces para encontrar esa que os funcione como anillo al dedo.
6. Hora de cambiar, bajar o subir el nivel
¿Queréis más intensidad? Cambiad la posición, apretad un poco más, jugad con ritmos distintos o cambiad el ángulo. ¿Queréis suavidad? Bajad la velocidad, haced movimientos más cortos o relajaos durante unos segundos.
Lo importante aquí es comunicarse. No hace falta dar un discurso completo, un gemido, un empujoncito suave, un gesto, un sonido… todo sirve para guiar al otro.
7. El gran final feliz
No hace falta acabar a la vez, eso es más fantasía que realidad. De hecho, es muy probable que no suceda. Pero si uno está al borde del orgasmo, puede aflojar un poco lo que está haciendo o incluso parar. También podéis cambiar de postura si queréis rematar de otra manera diferente.
Consejos y trucos para hacer un buen 69
El 69 puede acabar siendo un polvazo épico o una escena digna de una comedia romántica. Para que sea lo primero y no lo segundo, aunque también esté bien echarse unas risas, aquí te resolvemos algunas dudas y te damos algunos consejos prácticos para hacer un 69 épico.
¿Es normal que el 69 cueste al principio?
Por supuesto. ¿Recuerdas la primera vez que tuviste sexo con otra persona? Apostamos que no fue perfecto, que digamos. Usar la cabeza, la boca, las manos, mantener la postura y disfrutar al mismo tiempo no es tan fácil como parece. Pero con práctica y muchas risas, se vuelve algo natural y superdivertido. Es normal torcerse un poco al principio, lo raro sería hacerlo perfecto a la primera.
¿Cómo practicar un 69, acostados o de pie?
Acostados es la versión más cómoda, estable y apta para todos los públicos. Perfecta para empezar sin líos. De pie es otro nivel, requiere equilibrio, fuerza y total confianza en tu pareja, así que mejor probarlo cuando ya dominéis lo básico. Si os lanzáis, hacedlo con calma, mucha sujeción y, si puede ser, cerca de una pared. Os podéis ayudar de un columpio sexual si queréis hacerlo nivel experto.
¿Qué pasa si hay mucha diferencia de altura al hacer un 69?
Que no cunda el pánico, pasa más de lo que crees. La diferencia de altura solo significa que hay que ajustar un poco más la postura. Cojines, almohadas o hacerlo de lado pueden compensar esa diferencia perfectamente. También podéis poner a la persona más bajita arriba, que suele encajar mejor.
¿Cómo evitar distraerse mientras se da y se recibe a la vez?
Es normal perder el ritmo o desconectarse un segundo porque el cerebro no sabe si centrarse en dar o recibir. Respira, afloja y déjate llevar. No intentes controlarlo todo, disfruta del momento, siente lo que te hacen y responde sin presiones. Tu pareja está en la misma situación que tú y seguro está disfrutando del sexo oral que le estás dando, aunque no sea perfecto.
¿Se pueden usar juguetes mientras se hace el 69?
¡Claramente sí! Los juguetes sexuales pueden subir el nivel muchísimo y te ayudan a descansar un poco la lengua. Lo ideal son las balas vibradoras, succionadores o anillos para pene, cosas fáciles de manejar sin romper la postura.
¿Qué hacer si uno disfruta más que el otro?
La solución es tan simple como hablarlo. A veces uno necesita más presión, menos velocidad o un ángulo distinto. Ajustar no es fallar, es mejorar. También podéis cambiar roles, pausar un momento o buscar otra postura que equilibre el placer.
Y, si por lo que sea el 69 no acaba de encajar con vosotros, existe un universo infinito de posturas sexuales muy divertidas y placenteras que podéis probar, esto es como el zapato de la Cenicienta.
Ahora que ya tenéis un poco más de idea de cómo hacer un 69, habréis visto que no es una postura para expertos ni para contorsionistas y que es más fácil de lo que creéis.
Es una postura divertida, íntima y muy conectada para disfrutar juntos. Si os lo tomáis con humor, os ajustáis despacito y os comunicáis aunque sea con gemidos, puede convertirse en una de vuestras prácticas favoritas.
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